El tiempo sí pasa, lo altera todo y coloca las cosas en su lugar

En Santiago, últimamente se programan varios recitales de diversos artistas y tendencias musicales. Tuve el placer de asistir a cuatro de ellos, con músicos que conforman parte fundamental del desarrollo de lo que se denomina "la bossa nuova" o el "bossa", estos son: Caetano Veloso, María Bethania, Milton Nascimento y Toquinho. Cada uno en su estilo presentó lo mejor de su repertorio para una música que contiene sutilezas en las armonías y gran riqueza en los textos. Especialmente, cuando se interpretan temas de Jobim y Vinicius de Moraes, los que se encuentran en el inconsciente colectivo de la música universal con temas como: Corcovado, Insensatez o Chica de Ipanema. Lo llamativo de cada una de las presentaciones fue el respeto y silencio que existió a la hora de escuchar a cada intérprete / compositor con su estilo y banda propias. La voz de Caetano Veloso y Milton Nascimento, llenando el espacio con sus inflexiones y acentos sonoros, transforman cualquier tema que estos talentosos músicos brasileños interpreten y generan la metamorfosis necesaria para que cada concierto sea una experiencia única e inolvidable para el que escucha. La fuerza telúrica de María Bethania y sus desplazamientos en el escenario resultan llamativos para quién sólo acostumbra a escuchar sus producciones en cds. El virtuosísmo de Toquinho para interpretar la guitarra y su comunicación con el público, junto con un acertado acompañamiento del Zimbo Trío constituyen experiencias de aprendizaje en este maravilloso camino de la música. Otro punto, señalar que cada intérprete estuvo acompañado de músicos que cumplían a cabalidad la tarea de resaltar y potenciar las cualidades de los artistas que estaban en el escenario., junto con realizar interpretaciones muy logradas de temas conocidos por los asistentes a cada show. Punto aparte, merece María Creuza quién también se presento en esta capital, en el Teatro Municipal, realizando recuerdos de su relación musical con Vinicius de Moraes e interpretando sus temas más conocidos.
La proyección del bossa - a mi juicio - se inicia con la inserción en el mundo del jazz en Estados Unidos y los trabajos de Stan Getz y Joao Gilberto. Lo que vino después todo el mundo lo conoce. Hoy día resulta agradable reconocer a aquellos cultores, que proyectan este tipo de música que nació hace varias décadas. Entre las intérpretes que escucho a diario puedo mencionar a: María Rita, Bebel Gilberto, Rosa Passos, Badi Assad, Tania María entre otras y otros. Al parecer, en un verso de Vinicius y un acorde de guitarra de Gilberto, se quedó detenido el tiempo porque esta música me parece cada vez más agradable y hermosa.